Pese a su negativa, Ana llegó a palacio para servir a la reina, pero su belleza cautivó a Ramsés y provocó los profundos celos de Nefertari, quien comienza a arrepentirse de su elección.
Llegó el momento de comenzar su nueva vida. En un emocionante momento, Ana se despide de su madre, para iniciar sus funciones como dama de la reina Nefertari