La mujer cambiaba constantemente su apariencia y se mantenía encerrada en una parcela de Isla de Maipo.
Natalia Guerra fue condenada a prisión, en marzo del 2017 por el delito de parricidio, tras el sacrificio de su bebé en a secta de Colliguay, liderada por Ramón Castillo, conocido como "Antares de la Luz".
Por más de dos años Natalia Guerra se mantuvo prófuga de la justicia, y lo logró gracias al apoyo de su actual pareja, que le permitió permanecer oculta en diferentes domicilios y cambiar de apariencia constantemente.
El comisario Juan Pablo Pardo, de la Brigada de Investigaciones Policiales Especiales (BIPE), explicó cómo se logró la detención de Natalia Guerra y enumeró las técnicas que utilizó para mantenerse prófuga.