En cada Cuenta Pública presidencial, uno de los invitados obligados es el vehículo Ford Galaxie que usan los presidentes para llegar al Congreso de Valparaíso. Un auto que le permite al mandatario saludar a los ciudadanos en su camino, pero que, además, tiene una rica historia de tradición republicana en nuestro país.
¿De dónde viene y quién regaló el Ford Galaxie a Chile?
De acuerdo a la información proporcionada por el Departamento de Patrimonio Cultural de la Presidencia de la República, en 1968, elFord Galaxie 500 XL, un vehículo negro descapotable y de gran tamaño, llegó a Chile de manos de una donante muy especial: laReina Isabel II de Inglaterra.
Este presente real, entregado durante la visita de la monarca británica a nuestro país, fue recibido por el entoncesPresidente de la República,Eduardo Frei Montalva.
Decorado con elementos de la corona británica, elFord Galaxiemarcó un antes y un después en la historia de las ceremoniaspresidenciales en Chile, rompiendo con la tradición de utilizar carruajes en los traspasos de poder.
El Ford Galaxie y la Cuenta Pública: tradición desde 1970
Desde 1970, este impresionanteFord Galaxieha jugado un papel protagonista en las ceremonias más importantes del país, incluyendo la Cuenta Pública.
El vehículo comenzó a utilizarse en este tipo de eventos bajo el mandato delPresidente Salvador Allende,quien decidió reemplazar el tradicional carruaje presidencial durante laParada Militar.
Desde entonces, esteFord Galaxiese ha convertido en un símbolo de las ceremoniaspresidenciales en Chile, transportando a los líderes del país en eventos tan significativos como laCuenta Pública, la ceremonia oficial de las fiestas Patrias o el discurso del 21 de mayo.
A día de hoy, elFord Galaxie, con al menos 74 mil kilómetros a sus espaldas y tras algunas pequeñas modificaciones, continúa siendo un testigo de lujo de la historia y tradición de nuestro país.