Kaylah Bell quería que su fiesta de graduación fuera inolvidable. Por lo mismo, se preocupó de cada detalle de su vestuario y con la ayuda de su familia eligió un hermoso vestido largo de acuarela, con una brillante capa de color rosa y púrpura.
Pero al principio no todo salió como ella esperaba, ya que su tía encontró que el vestido hecho a medida para la ocasión no era lo suficientemente llamativo, por lo que decidió agregarle un cinturón de diamantes.
Sin embargo, había algo que la angustiaba y era no tener un acompañante para disfrutar de ese momento especial. Su abuelo, Alvin Hackett no lo pensó dos veces, eligió un traje con los mismos colores del vestido y acompañó a su amada nieta. Además, le consiguió una flor blanca y una cartera de fiesta elegante para que estuviera impecable.
La joven compartió las imágenes del inolvidable momento en su cuenta de Twitter, superando rápidamente los 105 mil likes.