Una joven canadiense de 21 años luce irreconocible tras perder más de 80 kilos. Alysha McNair pesaba 172 kilos tras perder el control de sus hábitos alimenticios y sufrir una adicción a la comida rápida.
La joven consumía alrededor de 2000 calorías en una sola comida, cuando esa cantidad es el máximo que se recomienda ingerir en un solo día.