Muchas mujeres encuentran que aplicar productos cosméticos es una tarea difícil, y al hacerlo suelen caer en errores involuntarios. Para evitar esto, queremos dar a conocer los más frecuentes y cómo evitarlos o corregirlos.
Recuerda que lograr una buena rutina requiere usar productos de calidad, acordes a tu piel y estilo de vida, y sobretodo mucha práctica.
1. Base o correctores en tonos que no van con el color de tu piel
Quedamos espantadas cuando vemos fotos y se nota la diferencia entre el cuello y la cara, u ojeras demasiado claras y que no tapan bien. Para evitar esta situación lo recomendable es usar bases ligeras e ir aplicándola en capas para lograr cubrir las imperfecciones. Mientras que para lograr el color deseado, se debe poner una gota de la base en el dedo y esparcirla verticalmente en la línea que separa el mentón con el cuello. Para ver bien hazlo mirando a un costado.
Los correctores se usan según el color de la ojera, si son de tonalidades violeta, se debe usar correctores en tonos amarilos. Si son de tonalidades oscuras o azuladas, un corrector naranjo; si son grisáceas se usan colores rosados claro.