La actriz estadounidense Bella Thorne se convirtió en una nueva víctima de la filtración de imágenes íntimas en Hollywood. Asimismo lo reveló ella en su cuenta de Twitter, donde tomó una decisión fuera de lo pensado en este tipo de situaciones.
Después de enfrentarse por mensajes con el hacker, quién la extorsionó para no difundir su contenido, ella misma subió las fotos y videos a sus redes sociales y le dejó un claro mensaje:
"Durante las últimas 24 horas me han amenazado con mis propios desnudos. Que te jodan a ti y al poder que crees que tienes sobre mí. Voy a escribir sobre esto en mi próximo libro".