En la versión 2019 de Coachella, Ariana Grande, era una de las artistas más esperadas del cartel. Por lo que la artista preparó un digno a las expectativas que había generado.
Durante su show subieron al escenario varios artistas, entre ellos Nicki Minaj, pero la gran sorpresa de la noche fue cuando los integrantes de NSYNC subieron a cantar con ella.